12 cosas que ver y hacer en Viena en enero
Visita Viena durante el mes de enero e inicia el año con múltiples actividades culturales, exquisita gastronomía y actividades al aire libre
Es posible que pienses que el frío invernal provoca que la capital austriaca pierda parte de su atractivo en enero. Sin embargo, a lo que habitualmente hay que ver y hacer en Viena se unen un gran número de actividades propias del primer mes del año.
En tu visita a esta histórica ciudad durante el mes de enero vas a poder degustar la gastronomía austriaca propia del invierno, recorrer las calles en búsqueda de un recuerdo, visitar el palacio de los Habsburgo, disfrutar de una noche de vals en la Ópera de Viena o patinar sobre hielo.
1. Asiste (con suerte) al Concierto de Año Nuevo en Viena
Por supuesto, el principal evento que tiene lugar en enero en Viena es el Concierto de Año Nuevo. La Sala Dorada del Musikverein acoge un concierto de música clásica que se retransmite por televisión a más de 90 países. Este concierto es interpretado cada año por la Orquesta Filarmónica de Viena y el programa musical está compuesto en su gran mayoría por obras de la dinastía de los Strauss y de algunos de sus contemporáneos.
Asistir a este concierto es el sueño de muchos, pero por desgracia no es nada sencillo. La gran demanda ha provocado que solo se pueda escuchar en directo si se sale elegido en un sorteo previo. En mi artículo sobre las entradas para el Concierto de Año Nuevo puedes ver toda la información que necesitas si quieres probar suerte.
Por fortuna, si vas a viajar a Viena y deseas asistir a algún concierto en una de las ciudades con más tradición musical del mundo no te van a faltar alternativas. Son muy habituales las combinaciones de conciertos y cena en varios escenarios de la ciudad, la mayoría de las veces palacios o salas realmente espectaculares.
Información práctica
- Ubicación: Musikvereinsplatz 1.
- Precio: si sales elegido en el sorteo prepárate a pagar entre unos 40 y unos 1200 €.
- Cuándo se celebra: el 1 de enero, sobre las 11 de la mañana.
2. Visita el palacio de Schönbrunn nevado y adéntrate en sus enormes bosques
Un destino turístico obligatorio en tu viaje a Viena durante enero es el palacio de Schönbrunn. Se trata de la residencia ocupada cada año por los Habsburgo, durante la temporada de verano.
Al visitar el palacio de Schönbrunn vas a poder adentrarte en sus enormes bosques nevados. Es posible que dichos espacios se encuentren un poco descuidados debido a las condiciones climáticas, pero esto no significa que vayan a pasar desapercibidos ante tus ojos.
Además disfrutarás del frío característico de la temporada, mientras observas las hojas de los árboles cubiertas de nieve, las sombras dibujadas en el suelo, las fuentes y los pequeños lagos helados. Igualmente, vas a poder sorprenderte con una imponente vista desde el Gloriette, un edificio que data desde 1775 y que fue empleado a lo largo de los años como comedor y sala de baile, entre otras cosas.
3. Haz una excursión a Wachau y a la abadía de Melk
Un plan ideal si viajas a Viena en enero es hacer una excursión a Wachau, a la abadía de Melk y a los valles del Danubio. De esta manera, podrás ver los espectaculares paisajes nevados al mismo tiempo que explorarás los viñedos, castillos, valles y abadías de la campiña austriaca.
En esta excursión, de aproximadamente 8-9 horas de duración, podrás disfrutar junto a un guía local de una de las excursiones más populares desde Viena. Visitarás el Valle de Wachau, las Ruinas del castillo medieval de Dürnstein y la Abadía benedictina de Melk. Además, disfrutarás de una comida típica austriaca en un restaurante local.
Y aunque no te lo creas, el viaje será muy cómo ya que el trayecto lo realizarás en un moderno autobús.
4. Visita el Museo Albertina para resguardarte del frío
Un plan ideal para resguardarse del frío es visitar el Museo Albertina, que esconde una de las colecciones gráficas más extensas del mundo, constituida por 65.000 dibujos y alrededor de un millón de grabados, además de obras de artistas de renombre como Katz, Mone, Cézanne, Kandinsky, Miró, Renoir, Magritte, Munch, Chagall o Picasso.
¡No lo dudes! Programa tu visita al Museo Albertina y contempla obras de varios estilos artísticos, como la colección de Batliner, de arte moderno europeo, además de cuadros de estilo impresionista o postimpresionista.
5. Realiza algunas compras de invierno mientras disfrutas de la arquitectura vienesa
El mes de enero es considerado temporada baja en Viena, por lo que encontrarás ofertas en las diferentes tiendas de la ciudad. Por ello, si eres amante de las compras, te interesará visitar los alrededores de la Catedral de San Esteban. Allí, hallarás ropa, calzado, accesorios, entre otros artículos.
También, puedes dirigirte al centro histórico de la capital austríaca. En esta área de la ciudad encontrarás un gran número de posibles regalos para que obsequies a tus familiares y amigos. Igualmente, hay tiendas con objetos tradicionales y productos de marcas reconocidas.
Lo mejor de todo es que, mientras efectúas cualquiera de estos recorridos, podrás apreciar la maravillosa arquitectura, monumentos y los característicos palacios de Viena, que combinan lo barroco con lo moderno.
6. Deslízate sobre las múltiples pistas de hielo del Wiener Eistraum
Los días del mes de enero son ideales para que disfrutes del Wiener Eistraum o sueño de hielo vienés. Se trata de un conjunto de pistas de patinaje (grandes, pequeñas y con elevación), que se conectan entre sí a través de una serie de caminos. La superficie general del parque es de 9.500 metros cuadrados y la entrada principal se encuentra enfrente del ayuntamiento.
No importa si no eres experto en el arte de patinar, porque vas a poder igualmente divertirte a lo grande en cualquiera de las múltiples pistas del Wiener Eistraum.
Vas a disfrutar de un paisaje de ensueño en todo momento, un fondo musical animado, la calidez y el brillo de las luces. Además, está la taquilla para el alquiler de patines precalentados con aire, para mayor comodidad.
Información práctica
- Ubicación: Rathausplatz.
- Precio: un bono para cuatro horas de patinaje para adultos sale por unos 8€, mientras que los niños pagan unos 6 €. También es posible alquilar los patines
- Horario: entre las 10 y las 22 h.
7. Vive una experiencia impresionante al ver el paso del Danubio congelado por Viena
Si tu visita a Viena es en enero, es conveniente ir fuera del casco histórico de la ciudad, ya que podrás encontrar maravillosas escenas naturales que te impresionarán.
Una de ellas es el río Danubio, el segundo más extenso del continente europeo y cuya trayectoria coincide con el Este de Viena.
Durante el invierno, la superficie de estas aguas se congela, lo que genera una delgada lámina de hielo, que te impresionará ver. Para ello, puedes aprovechar los conocidos paseos fluviales a través de las orillas del río, para que veas de cerca el gélido escenario, los barcos, cisnes y patos, que allí andan libremente.
8. Disfruta de la mejor vista de la Viena invernal desde las alturas
Entre las cosas que hacer en Viena de noche se encuentra contemplar la ciudad desde las alturas, mientras degustas un delicioso plato austríaco o una bebida caliente. Para ello, sólo tienes que ir a la Torre del Danubio, que es considerada el edificio más alto de toda Austria. La edificación posee 252 metros de altura y en la parte superior destaca una terraza acristalada. Dicha área te mantendrá protegido de las ventiscas y la nieve, sin limitar la visión panorámica de la ciudad.
Además, al subir a la Torre del Danubio podrás dirigirte a un primer nivel, en el que se encuentra una cafetería. Allí, puedes probar algunas especialidades de café y acompañarlo con una tarta o con la deliciosa repostería austríaca. Pero, si lo que deseas es una copa y un plato más elaborado para almorzar o cenar, en el segundo piso hay un restaurante.
Una particularidad de esta torre es que ambos pisos poseen un sistema giratorio con base en un conjunto de ejes. De esta manera, tanto la cafetería como el restaurante rotan cada 26 minutos, permitiéndote variar tu ángulo de visión sobre la legendaria ciudad de Viena.
Información práctica
- Ubicación: Donauturmplatz 1.
- Horario: para subir a la torre el horario es de 10:00 a.m. a 23:30 p.m. Ten en cuenta que la cafetería y el restaurante cierran un par de horas antes.
9. Bebe una taza de café vienés con historia en cualquier cafetería de la ciudad
Durante la época de 1653, los turcos fueron desterrados de Viena y a su partida dejaron unos sacos con granos de café. Así comenzaron a preparar esta bebida. Posteriormente, se crearon las primeras cafeterías que adaptan la intensidad del café a los diferentes paladares, incorporando endulzantes y leche. De hecho, desarrollaron una variedad de café llamado vienés, un expreso con una capa generosa de nata.
Precisamente esta bebida es la que disfrutarás durante tu estancia en Viena y puedes conseguirla en cualquier cafetería de la ciudad. Sin embargo, si tienes la oportunidad de ir al Café Central, la experiencia será aún más placentera. Esta cafetería fue el sitio de encuentro de grandes intelectuales y tiene una historia de poco más de 160 años.
Cuando entres a este popular café te transportarás en el tiempo, gracias a su arquitectura ornamental, los retratos en las paredes, el diseño elegante de sus sofás, mesas y lámparas. Definitivamente, una experiencia cultural con sabor a café vienés que no puedes dejar de vivir durante tu recorrido.
10. Ve a un spa vienés y entra en calor mientras te relajas en un ambiente de ensueños
El mes de enero en Viena es bastante frío, por lo que una tarde de spa resulta una actividad idónea para cualquier turista. En estos sitios podrás entrar en una bañera con sistema de chorros y disfrutar de un suave masaje. Además, el vapor herbal de la sauna envolverá tu cuerpo a medida que lo calienta y elimina cualquier impureza de tus poros.
La gran mayoría de los spas en Viena poseen una serie de piscinas con temperaturas programables. De esta manera, es posible que cada persona adapte el calor del agua según sus necesidades. Además, si has viajado a Viena con niños, no tendrás inconvenientes de llevarlos contigo, ya que algunas instalaciones incorporan piscinas y saunas especiales para los más pequeños de la casa.
Solo basta con que elijas alguno de los spas de gran popularidad dentro de la capital austríaca. En ellos te brindarán sesiones de masaje, duchas con temperatura de 32°C y deliciosas bebidas calientes (té y café).
11. Asiste al Baile de Ópera de Viena y disfruta de una noche de vals
Viena es conocida por su cultura de baile, ya que el compositor austriaco Johann Strauss utilizó la ciudad que lo vió nacer como una vitrina, a través de la que mostró al mundo el vals. Por ello, es tradición que cientos de personas se den cita en esta ciudad en enero y febrero para asistir a los deslumbrantes bailes que caracterizan el inicio del año.
Si estás de vacaciones en Viena, no puedes dejar de asistir al Baile de la Ópera, que tiene lugar en la Ópera de Viena. Se trata de una edificación que combina décadas de historia y una elegante arquitectura.
Por tanto, no sólo disfrutarás el ritmo del Danubio azul de Strauss y danzas bajo una lluvia de pétalos de claveles. También, podrás deslumbrarte con los ornamentos y detalles arquitectónicos de este recinto, reconocido mundialmente como el emblema de la capital austriaca.
Información práctica
- Ubicación: A Opernring 2.
- Precio: unos 15 € si solo se quiere acudir, sin asiento, al ensayo del día anterior. Para la noche del baile el coste es de unos 250 €, aunque con cena sube mucho más.
12. Pasa un día divertido en la estación de esquí Hohe Wand-Wiese
Si tu paso por la capital austriaca es en enero, no debes limitarte a recorrer el casco antiguo de la ciudad. También, puedes convertir tu visita a Viena en una verdadera aventura deportiva, pasando un día en la estación de esquí Hohe Wand-Wiese.
Esta es una estación ubicada en las afueras de la ciudad, concretamente en el bosque Wienerwald. La extensión de la pista es de 400 metros, posee un telesquí y un asombroso sistema de iluminación, ideado para que puedas disfrutar del paisaje durante las horas de la noche.
Por ejemplo, si decides esquiar por los senderos de la estación podrás disfrutar de la orilla del conocido río Danubio que, durante enero, posee una superficie congelada. Pero si prefieres subirte a un trineo con tus familiares y amigos, recorrerán las pendientes de Prater.
Datos climatológicos de Viena en enero
Enero en Viena es el mes con menos precipitaciones y con más nieve. El promedio de lluvia corresponde a 14 milímetros aproximadamente, mientras que la media de nieve se ubica entre los 61 milímetros. Además, la temperatura varía de -3°C a 3°C y generalmente amanece más tarde de lo acostumbrado (7:45 am).
Para los vieneses este mes suele ser uno de los más fríos del año, pero esto no es impedimento para continuar con las múltiples actividades turísticas en la ciudad.
De hecho, tan sólo necesitarás equiparte con la característica ropa invernal para mantenerte cálido, mientras recorres las calles de Viena en búsqueda de algún café, museo, zoológico y demás.
El turismo de Viena en enero
Viena en enero está poco concurrida turísticamente en comparación al resto del año. Esto se debe a las bajas temperaturas registradas en la ciudad a lo largo de este mes. Pese a ello, el comercio, los sitios históricos y de hostelería no paran.
Por lo demás, encontrarás poca aglomeración en las calles de Viena, lo que podría ser conveniente para que puedas desplazarte tranquilamente y, por qué no, conseguir ofertas en los mercados callejeros. No dejes de leer el post que ver y hacer en Viena y planifica tu viaje con todo detalle.