10 cosas que ver y hacer en París en primavera

La primavera en París es indudablemente una de las mejores épocas del año para visitar la ciudad francesa. Esto es gracias a un clima muy agradable con temperaturas suaves y una gran variedad de eventos y actividades propias de estos meses. Si quieres o vas a viajar a la histórica ciudad en primavera, en este post te comparto una lista de los mejores planes que hacer en esta época y toda la información útil al respecto.

Conforme el buen tiempo aterriza en París los parisinos aprovechan para echarse a las calles y disfrutar de aquellos placeres que no pueden experimentar en gran parte del año. Hablo de algo tan simple como tomar un café en una bonita terraza. Un lujo solo reservado a la primavera y el verano, ya que el resto del año las temperaturas no acompañan.

Para disfrutar de ello uno de los mejores lugares es el barrio de Montmartre. En sus empinadas calles se encuentran decenas de las típicas cafeterías parisinas con sus pequeñas terrazas y bonitas fachadas. Un ejemplo es el café des Deux Moulins, cerca del Moulin Rouge, que fue escenario de la famosa película Amelie.

Pero hay muchas más que te invito a conocer y, para no perderte nada, la mejor opción reservar un tour guiado por el barrio de Montmartre que, te aseguro, no te dejará indiferente.

A mediados de mayo, casi para despedir la primavera y dar la bienvenida al verano, tiene lugar una de las noches más mágicas del año en París. La noche de los museos se celebra en todo el país, pero es en la capital donde más se disfruta.

En este evento participan también los grandes museos, que ese día abren sus puertas por la noche, y la actividad se complementa con conciertos y eventos artísticos y culturales por toda la ciudad, en un itinerario perfecto para disfrutar de la cultura en una noche mágica de la primavera parisina.

Muchos museos parisinos, como el museo del Louvre, suelen participar en la Noche de los Museos, pero si no estás en París en esa fecha o no te gusta trasnochar, siempre puedes visitarlos en su horario habitual:

• Reserva entradas sin colas para el museo del Louvre: el más grande del mundo, con 35000 objetos y obras de arte como la Mona Lisa o la Venus de Milo.

• Reserva entradas para el museo de Orsay: que aloja cientos de obras de los artistas más importantes del Impresionismo y Posimpresionismo, como Van Gogh o Matisse.

• Reserva entradas para el museo Picasso de París: que alberga 5.000 obras maestras del Picasso, así como su propia colección personal.

Si escoges las vacaciones de Semana Santa para viajar a París podrás aprovechar para vivir estas fiestas a la parisina. En este sentido, hay dos formas de disfrutarlo:

Desde un punto de vista más religioso, es una época idónea para visitar las iglesias de la ciudad, que son muchas y muy bellas:

• La Basílica del Sagrado Corazón.
• La Sainte Chapelle, cuyas entradas te recomiendo reservar online.
• La iglesia de la Madeleine.
• Notre Dame, cuyos exteriores puedes admirar contratando un tour por la Isla de la Cité, Notre Dame, Sainte Chapelle y la cárcel de La Conciergerie en el que recibirás explicaciones acerca de su arquitectura. Lamentablemente, la Catedral no se puede visitar por dentro desde los incendios del año 2019.

Por otra parte, la alternativa típica para disfrutar la pascua tiene más que ver con el sentido del gusto que con el de la vista. Hablo de los famosos huevos y conejos de chocolate típicos de estas fiestas. París es una ciudad pastelera y en sus calles se encuentran cientos de pastelerías que ofrecen estas delicias de chocolate. Si te gusta el dulce, reservar un tour por las pastelerías de París puede ser también un planazo, ¿verdad?

Cuando los árboles florecen, las temperaturas suben y los días son más soleados pasear por París es una auténtica gozada. Hacerlo a pie siempre es recomendable, pero restringe mucho la distancia que podemos cubrir. Por ello en primavera una de las mejores recomendadas es alquilar una bici y recorrer París aprovechando el buen tiempo. Para ello tienes varias opciones:

• Reservar la tarjeta turística París Pass, con la que puedes coger bicicletas públicas y recorrer el centro o incluso descubrir las afueras de la capital con lugares tan interesantes como el bosque de Vincennes. Son tantas las ventajas de la París Pass, que te recomiendo leer este post para que te enteres de todo.
• Reservar un tour guiado en bicicleta por París, con el que durante 4 horas y acompañado por un guía experto recorrerás los monumentos más importantes de la capital francesa.

Siempre es recomendable conocer París desde diferentes perspectivas. Y una de las más bellas es hacerlo con uno de los mejores cruceros por el Sena De hecho, el tiempo es tan agradable en primavera que incluso puedes recorrer el Sena a bordo de un crucero nocturno crucero por el río Sena.

En el recorrido verás monumentos como los Inválidos, el Museo de Orsay, la Catedral de Notre Dame, el Museo del Louvre, el Gran Palais o la Torre Eiffel.

Puedes elegir acompañar tu crucero con una cena a bordo o elegir entre varias opciones y combinaciones.

Ya que conforme avanza la primavera es cada vez más habitual tener días y cielos despejados una de las mejores opciones para aprovechar este hecho es ver París desde las alturas desde los mejores miradores de París.

El más famoso de ellos es, por supuesto, el de la Torre Eiffel. También es el de mayor altura, pero hay más alternativas como:

• El mirador de la basílica del Sagrado Corazón.
• El rascacielos de Montparnasse, el segundo edificio del estilo más alto de Francia, y para que te recomiendo que reserves tus entradas con antelación.
• La terraza superior del Arco del Triunfo, cuyas entradas también puedes reservar online.

París es más bonita, aún si cabe, desde las alturas.

El Palacio de Versalles es una de las excursiones imprescindibles que hacer si viajas a París. El encanto del lugar no solo reside en el palacio, también en los jardines del mismo. Considerados como uno de los más bellos de Europa y del mundo, los jardines reales de Versalles lucen especialmente bonitos en primavera.

La decoración floral es tremendamente bella en esta época y los jardineros ponen especial mimo en que luzcan espectaculares. En estos meses también puedes disfrutar del espectáculo que hacen con las fuentes del palacio jugando con las luces y la música.

Reservar entradas para el Palacio de Versalles, los jardines y la finca de María Antonieta es una visita primaveral obligada.

París es una ciudad repleta de parques y jardines de mucha belleza y cuyo cuidado se efectúa con especial mimo. Es en primavera cuando más bonitos lucen estos lugares principalmente por la floración, que regala a los paseantes una postal muy colorida y bella.

Hay decenas de parques y jardines perfectos para un agradable paseo primaveral:

• El jardín de las Tullerías, entre el Louvre y la plaza Concorde.
• El Parque Montsouris en el sur de la ciudad.
• El Parque de Belleville, en la colina con el mismo nombre y con una de las mejores vistas de la capital.
• El Parque de Buttes Chaumont, situado en una antigua cantera al este de París.

Si preguntas a un parisino de pura cepa cuál es su actividad favorita en primavera existe una probabilidad muy alta de que su respuesta sea hacer un picnic. Es una postal muy típica de París en esta época del año en lugares como en el Campo de Marte bajo la Torre Eiffel.

Pero de entre todas las opciones en este sentido que podemos visitar en la ciudad francesa, la favorita por los parisinos, y mi recomendación personal, son los jardines de Luxemburgo, que cuentan con una decoración floral muy cuidada y grandes espacios de césped donde hacer los típicos picnics primaverales cuando el tiempo acompaña. Una actividad imprescindible en la primavera parisina.

La primavera es también tiempo de grandes eventos deportivos, y dos de los más grandes tienen lugar en esta época:

• El el maratón de París tiene lugar a principios de abril y reúne a más de 60.000 corredores y muchos más espectadores en torno al recorrido de la carrera, que pasa por lugares tan emblemáticos como Notre Dame, el Louvre o la Torre Eiffel.
• El Abierto de Francia de Tenis, o Roland Garros, es el torneo más importante sobre la superficie de tierra batida, y reúne siempre a los mejores tenistas del planeta. Se celebra a finales de mayo y comienzos de junio en las instalaciones del complejo Stade Roland Garros de París.

El clima es uno de los factores fundamentales a la hora de decidir en qué fechas vas a visitar París u otra ciudad. En este sentido la primavera tiene argumentos de sobra para convencerte.

En los meses de marzo, abril y mayo las horas de sol aumentan progresivamente y con ellos la temperatura. De los poco más de 10º de máxima que hay en marzo pasamos a una media de 20º en mayo. En general, es un clima muy agradable con temperaturas muy suaves.

El único pero que se le puede poner a la primavera, y es una cuestión habitual en casi todos los meses del año, son las precipitaciones. Mayo es uno de los meses más lluviosos del año y en general es casi imposible esquivar la lluvia en primavera.

En general en los meses de primavera la afluencia turística no es masiva, teniendo en cuenta de que París es una de las ciudades más visitadas del mundo, y no encontrar demasiados problemas para conseguir alojamientos.

La excepción es la Semana Santa, ya que en este periodo vacacional muchos aprovechan para visitar París y en esas fechas sí que aumenta considerablemente la demanda y la afluencia de turistas.

Los precios de los alojamientos y lugares turísticos como París dependen especialmente de la demanda. Puesto que en primavera aún no es temporada alta, la demanda no es tan elevada y por tanto los precios se mantienen dentro de lo razonable.

La excepción es Semana Santa, ya que en muchos lugares son vacaciones y la demanda de alojamientos sube considerablemente. Y con la demanda suben también los precios.

En primavera puedes experimentar de todo, desde días soleados y agradables hasta días de lluvia y viento. Por todo ello debes hacer tu equipaje a conciencia y estar preparado para varios escenarios. Lo que no debe faltar en tu maleta es:

• Ropa ligera y cómoda para los días soleados y más primaverales.
• Algo más de abrigo para los días nublados y para las noches.
• Calzado cómodo para las largas caminatas que harás por las calles de París.
• Un paraguas o chubasquero por si te pilla la lluvia.