Más acerca de: Qué ver y hacer en Burano
Ubicada a 64 kilómetros de la gran Venecia se encuentra la isla de Burano, formada por 4 pequeñas islas conectadas entre sí por diversos canales y puentes con una superficie de tan solo 20 hectáreas. Su pequeño tamaño hace que sea realmente sencillo recorrer sus calles si reservas una excursión de un día desde Venecia, que incluye además Murano y Torcello. ¿Quieres saber cuáles lugares imprescindibles para conocer de esta ciudad? ¡Atento!
1. Tour por el Museo del Encaje de Burano
Burano es famoso por su encaje como lo es Murano por el vidrio, aunque los artesanos del encaje en esta isla datan de tiempos muy antiguos fue realmente a partir del siglo XIX que los encajes de Burano gozan del interés de la comunidad italiana más allá de la pequeña isla.
La historia del encaje en Burano evolucionó a la par de la historia de la isla remontándose al año 1872, en esos tiempos se le pidió a la talentosa encajera Vincenza Memo, enseñar los secretos de su arte como una forma de dinamizar la economía local.
En este espacio podrás encontrar importantes colecciones de encajes con cientos de ejemplares únicos que datan de distintos periodos pero principalmente de entre los siglos XVI y XX. Aunque la escuela fue cerrada al interior del museo se organizan cursos de formación profesional para todos los interesados en este arte milenario.
2. Asiste a una demostración en vivo del arte del encaje
Las tiendas de encaje son espacios curiosos que exhiben un toque pintoresco pero que además sobrecogen por las muestras de talento de este arte tan sutil. Parecido a como sucede en el Museo del Encaje, serás testigo de la creación de bordados hermosos con herramientas tan aparentemente sencillas como el hilo y la aguja. Lo más divertido de visitar las tiendas de encaje en Burano es poder presenciar en vivo una de las tejedoras locales que crea las piezas frente a tus ojos con un cuidado impresionante.
Este tipo de presentaciones se han vuelto tradicionales en la isla por lo que en todas las tiendas de encaje te encontrarás con una demostración de este tipo. Obviamente, tras ver el espectáculo puede que estés más inclinado a comprar.
3. Maravíllate con las casas de colores de Burano
Si finalmente te decides por reservar una excursión a Murano desde Venecia, no te arrepentirás porque merece totalmente la pena caminar por las callejuelas de la ciudad para admirar las coloridas casas, que resaltan bajo el cielo azul en una variedad de colores pasteles y brillantes.
Burano y sus casitas de colores son una atracción turística de la isla en conjunto con sus artesanos del encaje, sin embargo la historia detrás del porqué es más interesante de lo que te puedas imaginar.Según cuentan los lugareños las fachadas de las casas eran todas pintadas en colores distintos como una forma de guiar en la neblina a los pescadores que trabajaban de sol a sol y en los más intrépidos climas. Al volver a casa, las fachadas de colores hacen más fácil encontrar el camino de regreso.
4. Conoce la Casa Bepi
Si contratas tu excursión a Burano, cuando llegues a la isla deberás prestar especial atención a la bonita casa del de Bepi Suà, conocida por todos como Casa Bepi. Aunque las casas de colores en Burano eran algo establecido por una cuestión de practicidad, sería Giuseppe Toselli, quien le daría a esta singular característica el atractivo turístico que hoy conocemos.
Toselli, aficionado de la pintura se decidió a convertir su casa en la más colorida de todo Burano. Cada año pintaba su fachada con colores y patrones diferentes, por lo qué se convirtió en una especie de juego para los visitantes ir a conocer los nuevos colores de la Casa Bepi; esta tradición siguió hasta su muerte en el año 1985.
Durante dos décadas la colorida fachada cayó en el abandono pero desde el año 2005 se escogió una de las vibrantes fantasías de Toselli para animar nuevamente la fachada y devolverle un poco de su brillo.
5. Conoce los puentes de Burano
No solo en la isla de Venecia podrás encontrar hermosos puentes, cuando se trata de este tipo de estructura Burano también tiene sus curiosidades. Puedes aprovechar que has contratado tu excursión a Burano para recorrer sus puentes en especial el conocido como Puente Tre Ponti; cuyo nombre se deriva de su particular e ingeniosa estructura. Colocado estratégicamente en el punto de unión de tres islas, el puente conecta cada una de ellas a través de sus tres escalinatas.
Al igual que la gran Venecia, Burano está conformado por pequeñas islas unidas por puentes; estas islas son: San Mauro, Giudecca (en Venecia también hay un barrio con el mismo nombre), San Martino Sinistra, San Martino Destra y Terranova.Para llegar a Tre Ponti desde el embarcadero deberás seguir recto a través de Viale Marcello.
6. Haz una parada para comer las delicias de Burano
Después de recorrer canales, puentes y museos tomate un tiempo para comer un rico almuerzo en alguno de los muchos establecimientos que hallarás en tus andanzas por Burano. Si quieres algo de inspiración considera los siguientes establecimientos..
Trattoria al Gatto Nero: Ideal para disfrutar de la comida tradicional veneciana. El restaurante trabaja de martes a domingo tanto a la hora del almuerzo como para la cena; si llamas con antelación podrás reservar una mesa con vista al Gran Canal.
Trattoria da Primo: Al entrar a este establecimiento te encontrarás con un enorme comedor estilo cantina y una bonita decoración que alude al casco de un barco. La Trattoria da Primo es uno de los establecimientos favoritos de los lugareños e ideal para probar platos típicos venecianos como risotto de pescado de Gó.
7. Prueba el bussolai, el dulce típico de la isla
Las galletas tradicionales venecianas conocidas como Bussolà, tienen su origen en la pequeña isla de Burano; por lo que en un tour por la isla deberás hacer tiempo para probar este rico aperitivo hecho con la receta original y de una forma mucho más tradicional. Si gustas, acompañalas con un vino y llévate unas cuantas unidades para después.
Hechas a base de harina, mantequilla y huevos tienen un característico agujero en el centro que las hacen parecidas a unas donas. Las bussolà son galletas que se conservan muy bien, cuentan que en los tiempos en los que la comida era escasa, la esposas de los pescadores preparan las galletas en grandes cantidades; con la intención de ayudar a los marineros a soportar las interminables jornadas de trabajo en el mar.
8. Conoce la Torre inclinada de Burano
Al igual que en la famosa Pisa, Burano tiene su propia Torre Inclinada que no deberás dejar de conocer en un recorrido por la isla y su bonita arquitectura. En realidad más que una torre es el campanario de la única iglesia de la ciudad; el templo fue erigido en honor a San Martín en el siglo XVI, el campanario con sus 53 metros de altura fue edificado entre los años 1703 y 1714.
La razón de la inclinación del campanario es a raíz de los pilares utilizados en la base del edificio, que con el tiempo empezó a ceder hacia uno de los lados. Para en la década de 1970 se consiguió estabilizar la estructura, deteniendo totalmente la amenaza; a día de hoy el campanario es bastante seguro y forma parte de una curiosidad más de las muchas que podrás encontrar en la isla.
9. Recorre la Plaza Baldassarre Galuppi
La única plaza de la isla de Burano lleva el nombre de Plaza Baldassarre Galuppi. Es un gran espacio abierto dominado por varias edificaciones importantes: la iglesia de San Martino Vescovo, El museo del encaje, la Capilla Santa Barbara y el edificio del ayuntamiento. En medio de la plaza encontramos el tradicional pozo (como en la mayoría de plazas venecianas), también encontrarás el asta de la bandera de San Marcos y la estatua del mismísimo Baldassarre Galuppi.
Es un bonito lugar para sentarse a disfrutar del buen clima, tomar fotografías de las bonitas edificaciones y conocer los vendedores en puestos ambulantes que siempre circulan por el lugar.
10. Visita el Mercado de pescado
Al cruzar Tre Ponti hasta la isla de San Martino Sinistra te encontrarás con otro lugar importante: el Mercado de Pescados de Burano. Conformado por una pequeña plaza al aire libre es el mercado tradicional de la isla por lo que aún hoy se utiliza para la exhibición de productos. Su ubicación estratégica en las cercanías del canal lo convierten en el espacio ideal para que los pescadores que se aventuran en la laguna salada puedan llegar fácilmente con producto fresco para servir a la población. A lo largo de la plaza hay por lo menos una veintena de puestos en los que se exhibe el pescado fresco para ser vendido.
Es importante no confundir el Mercado de pescado con la Pescaderia Vecia, que tiene el mismo fin y es igualmente conocida en Burano y alrededores. Esta pescadería está ubicada en la isla de Giudecca.
11. Conoce el edificio del ayuntamiento
Ubicado justo al lado del Museo del Encaje se encuentra el edificio del ayuntamiento de Burano; su una fachada, un tanto desvencijada, le da un aspecto particular y encantador. Posee un nivel más que la estructura del Museo por lo que destaca ligeramente sobre este.
La antigua construcción presenta los materiales típicos de las construcciones en Burano: el uso del ladrillo en la estructura principal y el empleo de perfiles elaborados en piedra de istria para resaltar los huecos en los muros. El ladrillo en el primer nivel se encuentra en estado natural pero en los niveles siguientes siguen revestidos con yeso en un tono rosa pálido. El sencillo juego de ventanas y huecos sobre la fachada es bastante pintoresco.
12. Da un paseo a pie hasta Mazzorbo
Si eres amante de la comida y el buen vino un rápido paseo para conocer los viñedos en Mazzorbo es algo que deberás considerar si reservas una excursión a Burano. Conocido como la Finca Venisssa, es un viñedo amurallado donde se cultiva un tipo de uva autóctonas de la isla de Venecia conocida como la dorona. Hace mucho tiempo la gran isla de Venecia estuvo cubierta de este y otros cultivos antes de que los habitantes de Torcello, Burano y Mazzorbo decidieron empezar a construir allí sus casas y palacios.
Desde Burano llegar a Mazzorbo es muy simple; solo necesitas tomar el puente de Via San Mauro que conecta las dos islas. Desde el centro de Burano el recorrido a pie te llevará solo 15 minutos.