Itinerario para ver Cracovia en 4 días
Con cuatro días en Cracovia tendrás margen de sobra para conocer la ciudad en profundidad y el campo de concentración de Auschwitz. Te doy todos los detalles para optimizar tu tiempo.
Aunque 4 días en Cracovia no son muchos, son suficientes para disfrutar de los lugares más mágicos que ofrece la ciudad (y sus alrededores). Sin embargo, es normal que no sepas qué lugares son los imprescindibles, y cuáles no importa dejarlos atrás.
Pero has llegado al lugar adecuado porque quiero contarte una de las formas más completas de conocer en pocos días esta ciudad polaca que, en su momento, fue la capital del país.
Día 1: familiarízate con la ciudad
Cracovia es una joya medieval y cualquier fin de semana largo en esta ciudad debe empezar obligatoriamente por la Plaza del Mercado. Desde allí podrás alcanzar fácilmente los principales monumentos. ¿Estás listo? ¡Vamos a descubrir lo mejor de Cracovia!
Empieza las vacaciones con un desayuno tradicional
¿Estás familiarizado con el desayuno polaco? En el país del norte de Europa, la primera comida del día es también la más importante, tanto que a las 11:00 suelen tener un segundo.
Los lugareños suelen empezar la jornada con una rebanada de pan con kielbasa (una salchicha aromatizada), huevos revueltos o queso quark con rábanos. Huevos duros y arenques pueden completar el menú.
Muchos establecimientos de la Plaza del Mercado proponen un desayuno tradicional:
- Smakolyki (calle Straszewskiego 28).
- Dynia: particularmente recomendable para los meses más cálidos ya que cuenta con un bonito jardín. (calle Krupnicza 20)
- Moment Resto Bar & Music: recomendable si te alojas en el barrio de Kazimierz. (calle Estery 22)
Pasea por el casco antiguo
Hasta el XVI, Cracovia era la capital de Polonia. El rey Sigmund III Vasa trasladó su corte a Varsovia, pero no pudo llevar consigo los espléndidos edificios que componen el centro de la ciudad.
Esta zona es muy compacta y puede ser visitada fácilmente a pie en solitario o en un tour por el casco antiguo. En tu recorrido, podrás ver una serie de monumentos fascinantes:
- Plaza del mercado (Rynek Główny): una de las plazas más grandes de Europa. Está rodeada de casas coloridas mientras que en el centro se eleva uno de los símbolos de la ciudad, la Lonja de los Paños, un antiguo mercado que ha conservado su vocación comercial.
- Calle Floriańska (ulica Floriańska): una de las calles comerciales más prestigiosas del país. Es parte de la Ruta Real, un viejo trazado que llega hasta la colina de Wawel.
- Colina de Wawel: un montículo que domina la ciudad. Aquí se encuentra la catedral, el Castillo de Cracovia y una gran cueva donde, según la leyenda, vivía un dragón que atormentaba a los lugareños.
- Basílica de Santa María (Kościół Mariacki): la iglesia principal del casco antiguo que se distingue fácilmente por sus torres asimétricas.
- Barbacana: una de las fortificaciones medievales mejor conservadas de Europa. Fue construida para controlar la cercana Puerta de San Florián
Descansa en el verde del Parque Planty
Tras haber visitado la Barbacana, te bastará caminar unos pocos metros para llegar hasta el Parque Planty, un anillo verde que rodea la ciudad. ¡No hay otra ciudad en Polonia que pueda presumir de un lugar tan bonito!
Este jardín urbano nació a principios del siglo XX, cuando las autoridades de la ciudad decidieron reconvertir las murallas en un lugar de ocio.
En la actualidad, el Parque Planty está dividido en ocho jardines que se extienden a lo largo de unos 4 km.
Termina la jornada con una merecida cena
Para aplacar el hambre, no hay nada mejor que unas buenas costillas. En Cracovia, si quieres degustar este plato tienes que dirigirte hacia Plac Dominikański 2. Aquí se encuentra el restaurante Rzeźnia, un lugar para carnívoros empedernidos.
Si no te apetece comer costillas, puedes optar por un tartar polaco o unas alitas de pollo estilo Buffalo. En Rzeźnia, las porciones son muy generosas y puedes acompañarlas con unos tragos de vodka local. Total, mañana no se trabaja, ¿verdad?
Y si te apetece algo más especial, puedes matar dos pájaros de un tiro cenando mientras disfrutas de un espectáculo de folclore polaco en un restaurante mítico de la ciudad en el centro de Cracovia. ¡Tú eliges!
Día 2: sumérgete en un lugar mágico
Tras haber visto el casco antiguo, puedes dedicarte a una excursión que te hará bajar al centro de la tierra. Naturalmente, estamos hablando de hacer una excursión a la mina de sal de Wieliczka, un lugar mágico a escasos km de Cracovia.
Dedica una mañana a la mina de Wieliczka
La mina de sal de Wieliczka se encuentra a unos 15 km de Cracovia y es un destino muy popular tanto entre los turistas como entre los locales.
El yacimiento fue inaugurado en el siglo XIV y su desarrollo se debe en gran parte a los esfuerzo del rey Casimiro III el Grande que otorgó muchos privilegios a los mineros y fundó un hospital para curarles.
Este lugar mágico tiene una profundidad de 327 metros y es atravesado por una red de cámaras y galerías salpicadas de figuras esculpidas. A continuación, te dejo un breve listado de sus atracciones más famosas y que podrás visitar en una excursión a las Minas de Sal de Wieliczka desde Cracovia:
- Capilla de Santa Kinga: el buque insignia de la mina. Este lugar de culto fue tallado por dos hermanos visionarios a lo largo de 30 años de trabajo.
- Cámara Weimar: el mayor reclamo es su diminuto lago iluminado.
- Capilla de San Antonio: un monumento barroco excavado en un bloque de sal verde. Está decorado con figuras de santos y cuenta con un púlpito tallado enteramente en sal.
- Cámara Gołuchowski y su estación: durante el siglo XIX, los mineros utilizaban un ferrocarril subterráneo y la estación se encontraba en este mismo ambiente.
- Cámara Spalone: el lugar más “explosivo” de Wieliczka. Unos hombres de sal con unos largos palos en la mano recuerdan los trabajadores que más arriesgaban sus vidas, los quemadores. Su tarea era quemar el metano antes de que su concentración provocase una explosión.
Pasea por el barrio de Kazimierz
En el siglo XV, los judíos fueron expulsados de Cracovia y acabaron mudándose a este distrito. Antes de la segunda guerra mundial, cerca de 60.000 judíos vivían aquí y se ocupaban de cualquier oficio, desde la restauración a la artesanía.
Pero en 1941, los alemanes llegaron a la ciudad y sacaron a los moradores de sus casas. Los judíos acabaron viviendo en el barrio de Podgórze o en los campos de concentración de Auschwitz y Dachau.
Tras el conflicto, Kazimierz cayó en el olvido y solo en la década de los noventa volvió a su antigua gloria, por lo que ahora puedes hacer un tour por el barrio judío para conocerlo. Hoy en día, el antiguo gueto judío es el barrio más vibrante de Cracovia. El pasado revive en las sinagogas y por la noche, las calles se animan gracias a su rica oferta de diversión:
- Klub Piękny Pies: ideal para tomar un trago y disfrutar de música indie, soul o grunge. (Plac Wolnica 9)
- Alchemia: posiblemente el bar más conocido de Kazimierz.
- Para más info, te recomiendo leer el post Qué ver y hacer en el barrio judío de Cracovia.
Date un homenaje en un restaurante tradicional
Entre los restaurantes ligados a la tradición, el Czarna Kaczka merece una mención especial. Su nombre significa “el pato negro” y, como puedes imaginar, está especializado en este tipo de carne. Aquí puedes catar:
- Pato asado a la cracoviana con rábano picante y salsa de setas.
- Magret de pato al vino tinto acompañado por unas albóndigas de col lombarda y ciruela seca.
- Pescado de agua dulce como la trucha frita en mantequilla o el filete de lucioperca.
- Platos vegetarianos que incluyen unas excelentes tortitas de patatas.
Pero si te apetece aprovechar al máximo tu visita al barrio judío, puedes probar sus platos y empaparte al máximo de su cultura en un tour gastronómico por Kazimierz.
Día 3: sal de la ciudad para ver el peor legado de la Segunda Guerra Mundial
Auschwitz-Birkenau es un memorial de la crueldad humana. Teniendo cuatro días, te recomiendo visitar este lugar tristemente famoso.
Visita el tristemente famoso campo de concentración de Auschwitz
Este campo de concentración se cobró la vida de 1,1 millones de personas. Cuando la segunda guerra mundial estaba a punto de acabar, las autoridades nazis intentaron destruir las pruebas del genocidio pero, afortunadamente, la liberación del campo en el enero de 1945 impidió que el proceso se llevara a cabo.
Después del conflicto, el gobierno polaco decidió restaurar Auschwitz-Birkenau para convertirlo en un memorial y museo. Desde 1979, el lager es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco y recibe más de 2 millones de turistas cada año.
Visitar Auschwitz desde Cracovia es posible, pero equivale a revivir una página horrenda de la historia contemporánea. Sin embargo, el conocimiento es conciencia.
- El artículo Cuánto cuesta visitar Auschwitz: precio de las entradas y las visitas guiadas explica punto por punto todas las opciones disponibles. Te aconsejo elegir una visita por la mañana, de este modo podrás volver a Cracovia para comer.
Vuelve a Cracovia para comer algo
Auschwitz-Birkenau es muy grande y gran parte del tiempo la pasarás caminando entre barracones y descampados. Aunque el lugar te hará sentir un nudo en el estómago, al volver a Cracovia podrías tener hambre. Una buena manera para saciarla es con unos pierogi, el comfort food polaco por excelencia.
Existen decenas de lugares especializados y dos de los más apreciados son:
- Pierogarnia Station: utiliza la receta de Ula (la tía de los propietarios) y cuenta con ocho establecimientos tanto en el centro como en las afueras de Cracovia.
- Robimy Pierogi: un food truck de en el barrio de Kazimierz (calle Dajwór 21) ideal si no te apetece sentarte y prefieres tomar unos pierogi para llevar. Sus dumplings están hechos a mano según las recetas tradicionales.
Disfruta de un agradable paseo en barco
Después de un día tan desafiante, lo ideal es una actividad relajante. Como bien sabes, la capital del voivodato de Pequeña Polonia (Małopolska) está bañada por el Vístula, un río que nace en los Montes Cárpatos y desemboca en el mar Báltico. Y en un crucero por el río Vístula podrás admirar edificios y monumentos desde una perspectiva distinta.
Los cruceros salen del puerto fluvial de Cracovia (bulwar Czerwieński) y duran aproximadamente una hora. Existen varios tipos de barcos disponibles según la temporada y/o el momento del día y la mayoría de las excursiones cuentan con unas audioguías.
Día 4: últimas compras
El último día puedes dedicarte a las últimas compras y a realizar unas experiencias originales. ¡Hay que aprovechar hasta el último minuto!
Compra unos souvenirs en la Lonja de los Paños
Unas vacaciones no se pueden considerar completas sin unos pequeños trofeos y el lugar ideal para hacerlo es la Lonja de los Paños.
Debajo de este majestuoso edificio hay decenas de puestos de comida, artesanía y souvenirs. Hemos preparado un pequeño listado con los recuerdos más típicos de Cracovia:
- Joyas de ámbar: Cracovia fue una etapa importante de la Ruta del Ámbar, un recorrido comercial que empezaba en el mar Báltico. En la Lonja de los Paños, los precios son sorprendentemente competitivos.
- Trajes regionales
- Juegos de ajedrez tallados a mano: en Polonia existe una versión peculiar de forma hexagonal que difícilmente verás en otras partes.
- Objetos de mimbre
- Żubrówka: el excelente vodka local que se reconoce por el bisonte de su escudo.
- Cerámicas.
- Obwarzanek krakowski: un pan trenzado que se parece a un bagel.
Pasea por el patio del Collegium Maius
Es el edificio universitario más antiguo de Cracovia. Construido en el siglo XV, el edificio es famoso por el reloj del patio. Cada dos horas, entre las 09:00 y las 17:00, unas figuras de madera aparecen y desfilan acompañados por una música tradicional.
Si te apetece, puedes visitar el Museo de la Universidad Jagellonica que custodia una colección de instrumentos astronómicos y astrológicos que datan de la segunda mitad del siglo XV.
Termina tu fin de semana largo con una experiencia singular
Tras la cena, puedes despedirte de la ciudad polaca con un poco de adrenalina: el tiro de hachas. Se ha ido convertido en una verdadera disciplina, tanto que existen unas ligas profesionales mientras que el campeonato internacional ha sido transmitido por ESPN.
En Cracovia, el lugar de referencia es Axe Nation. Lo encontrarás en la calle Grodzka 46, a escasa distancia de la Iglesia de San Pedro y San Pablo y del Museo arqueológico.
Sin embargo, si te apetece algo todavía más arriesgado puedes reserva un experiencia de campo de tiro en Cracovia. Eso sí, en este caso tendrás que hacer la actividad antes de la cena, pues está a las afueras de la ciduad.