10 cosas que hacer en Venecia en verano

La Ciudad de los Canales es uno de los destinos turísticos más visitados del planeta. Los atractivos que ofrece Venecia no se quedan solo en sus monumentos, iglesias y palacios, ya que la propia ciudad, con sus canales y puentes, es un reclamo para todos los que busquen un destino en el que disfrutar varios días.

El verano veneciano suele ser caluroso y, además, la ciudad se llena de turistas. A pesar de esos inconvenientes, nadie duda de que es una visita imprescindible, ya que es en esta época cuando celebra sus fiestas y actividades más llamativas. Además, es el mejor momento para disfrutar de la noche, especialmente dando un romántico paseo en góndola bajo las estrellas.

Si un paseo en góndola durante el día ya es una experiencia increíble, imagina poder hacerlo de noche, con los edificios y puentes tenuemente iluminados a tu alrededor. Esta actividad, que el frío del invierno en Venecia no permitiría, es totalmente aconsejable si viajas en verano. Así que no dudes en reservar un paseo en góndola por Venecia.

Una vez que anochece empieza a descender el calor propio de esta estación y es el mejor momento para realizar actividades interesantes. Entre ellas, sobre todo si viajas en pareja, se encuentra dar un paseo por los canales de la ciudad de Venecia y deleitarse con los reflejos que las luces dejan en el agua.

Además, la noche es el momento ideal para visitar los canales menos frecuentados, así como zonas alejadas del centro. Si puedes, pide al gondolero que pase por debajo del Puente de los Suspiros mientras te conduce en ese maravilloso viaje.

Si hay un evento (además del carnaval) que rivaliza con los mejores monumentos de Venecia en cuanto a atractivo para locales y visitantes ese es el famoso festival de cine. En realidad, la mayoría de los que acuden al Lido, donde se celebra, lo hacen con la esperanza de ver a alguna de las estrellas internacionales que acuden cada año, pero eso ya supone un reclamo suficiente para que te acerques.

El Festival de Cine de Venecia es el más antiguo del mundo y se celebra normalmente en la primera semana de septiembre. Como he señalado, la sede se encuentra en la isla del Lido y uno de sus máximos atractivos es ver llegar a los actores y actrices montados en góndolas para presentar sus películas, sin olvidar, claro está, el paseo por la alfombra roja.

Ten en cuenta que son muchas las personas que intentan ver esos momentos, por lo que si no quieres quedarte en la quinta fila debes llegar temprano. Por supuesto, también puedes asistir como público a alguna de las proyecciones. Solo tienes que comprar las entradas para aquellas que no sean específicamente para periodistas.

El verano es el mejor momento del año para disfrutar de la noche veneciana. Hay dos tipos de locales que protagonizan esas noches: los bacari y las terrazas de algunos edificios.

Si estás buscando un ambiente familiar y popular, lo tuyo son los bacari. Se trata de las típicas tabernas venecianas, con pocos asientos y un mostrador largo. Los más apreciados son los del barrio de San Polo y los de Cannaregio. Lo habitual es pedir una copa de vino o un spritz, el aperitivo más apreciado por los locales. Para acompañar la bebida nada mejor que los populares cicchetti, la versión italiana de las tapas. Entre otras especialidades, te recomiendo:

• Crotones con bacalao.
• Mozzarella in carrozza.
• Sardinas en saor.

Las terrazas son otra de las alternativas para tomar algo. La principal ventaja, que no es poco, son las maravillosas vistas de las que vas a disfrutar. Eso sí, el precio suele ser bastante más alto, ya que suelen pertenecer a hoteles de lujo como el Danieli. Otra opción muy interesante es reservar un tour gastronómico por Venecia en el que descubrirás todos los secretos de la historia culinaria veneciana.

El mejor lugar para despedir el verano veneciano se encuentra en una isla cercana famosa por sus trabajos textiles: Burano. Así que no dudes en reservar una excursión a Burano. Allí, la tercera semana de septiembre tienen lugar dos eventos muy recomendables, sin olvidar que la propia isla es una visita obligada para los que viajen a Venecia.

• Regata di Burano: La regata tiene similares características que la Regata Storica. En ella participan hombres y mujeres con distintos tipos de embarcaciones. Miles de venecianos se acercan a animar a los participantes, al igual que hacen los turistas que se encuentran en la zona.
• Sagra del Pesce Se celebra de forma simultánea a la regata y es una fiesta dedicada al pescado. En la isla se instalan numerosos puestos en los que se vende pescado frito, acompañado siempre de un buen vino blanco.

Los habitantes de Burano, los venecianos y los turistas se unen en la celebración y disfrutan de los platos de pescado entre las características casas de colores de la isla.

Si Italia es el país del helado o, mejor, del gelato, Venecia es la capital del mismo. Durante los calurosos días del verano no debe faltar nunca probar alguna de sus variedades.

Se dice que, tras un tiempo en el que perdió su popularidad, el gelato recuperó su esplendor cuando el comerciante veneciano Marco Polo regresó de su viaje a China. La ruta abierta por Polo llevó a Venecia un buen número de recetas de helado que fascinaron a la nobleza de la ciudad y desde allí se extendieron al resto de Italia. Hoy en día, Venecia cuenta con un gran número de heladerías en las que vas a encontrar todo tipo de sabores. Entre las más destacadas se pueden señalar las siguientes:

• Bacaro del Gelato: ofrece helados totalmente artesanales a un precio muy asequible. Uno de los sabores más populares es el de chocolate y pistacho
• Suso: situada muy cerca del Rialto, en este local vas a encontrar helados de sabores muy originales y con nombres tan venecianos como ópera o Bellini.
• La Mela Verde: ubicada no muy lejos de la plaza de San Marcos, la Mela Verde ofrece una buena variedad de sabores, todos elaborados de manera artesanal.
• Gelato Fantasy: algunos la consideran como la mejor heladería de la ciudad. Su helado más popular es el cremino al pistacho, aunque la copa gianduiotto, una especialidad veneciana, no se queda atrás.

Además, si reservas un tour gastronómico por Venecia y tienes la oportunidad de probarlos, no dudes en hacerlo.

Recorrer Venecia en verano, con las aglomeraciones de turistas y las colas para entrar en la Basílica de San Marco o en el Palacio Ducal puede ser agotador. La solución es dedicar una mañana o una tarde a relajarse en alguna de las playas cercanas a la ciudad.

Las más conocidas son las situada en la isla del Lido, a donde puedes llegar con el vaporetto. Para ello, reserva un abono de transporte de Venecia y podrás llegar sin coste adicional. Estas playas eran las escogidas por parte de la burguesía europea para pasar el verano y hoy en día están consideradas como las mejores de la zona. Las playas del Lido son de arena fina y los paisajes son bastante bellos y pintorescos. Eso sí, la afluencia en julio y agosto suele ser bastante alta.

Los que prefieran huir de las aglomeraciones (aunque solo un poco) pueden elegir las playas situadas en otras islas, como la de Jesolo, Eraclea o Cavallino. La mejor valorada es la Jesolo, donde además puedes visitar su hermoso faro.

La Regata Storica es uno de los eventos del verano veneciano que más emociona y atrapa a los habitantes de la ciudad y a los visitantes. Si estás en Venecia durante su celebración, deja lo que estés haciendo y no te pierdas el colorido de la procesión ni la emoción de las competiciones. Si puedes, trata de lograr un sitio en las gradas que se instalan con vistas al puente de Rialto.

Esta regata (regatas en realidad) es un homenaje a la dependencia de la ciudad de las vías acuáticas que forman muchas de sus calles. Normalmente, tiene lugar el primer domingo de septiembre y en las cuatro pruebas que se realizan participan diferentes tipos de embarcaciones, incluidas las góndolas.

Muchos de los participantes, sobre todo los gondoleros, se disfrazan con trajes de época para recorrer el trayecto por el Gran Canal de Venecia. Tanto el desfile anterior a las pruebas como las mismas regatas se acompañan de actuaciones musicales, comida tradicional y bebida, sobre todo vino.

El tercer fin de semana de julio, Venecia celebra la fiesta más importante del verano, con actividades que se extienden a los días posteriores: la Fiesta del Redentore que además de su vertiente religiosa, ofrece a locales y visitantes un fantástico espectáculo de fuegos artificiales, bailes, comida tradicional y tres regatas de los típicos barcos venecianos.

Esta fiesta se celebra desde hace cinco siglos y conmemora el final de la terrible epidemia de peste que asoló la ciudad entre los años 1575 y 1577. Al final de la misma, cuando un tercio de los habitantes de Venecia habían fallecido, se construyó la iglesia del Redentor en la isla de Giudecca, situada frente a la ciudad.

Los venecianos comienzan a preparar los festejos ya en la tarde del sábado. Primero montan en sus barcos decorados con luces de colores y farolillos y con mesitas para comer. El ambiente en el agua es de fiesta, con música, comida y cantos. Aunque no será fácil, es posible que encuentres a alguien que acepte subirte a su barco para participar de manera activa. Y sino, en las riberas de los canales se instalan grandes mesas (sobre todo en el Canal de la Giudecca) en las que se sirven platos tradicionales para la cena.

Fuegos artificiales

Tras esto, miles de personas tratan de situarse en el mejor lugar posible para contemplar el espectáculo de fuegos artificiales. Ten en cuenta que es complicado encontrar un buen sitio, ya que muchos esperan allí de pie durante un par de horas. Los fuegos, finalmente, suelen comenzar sobre las 23:30 y se prolongan, nada menos, durante 45 minutos.

Los lanzamientos se producen desde la isla de la Giudecca, lo que hace que las formas y luces de los fuegos se reflejen bellamente en el agua. La sensación es que toda la bahía se ilumina durante ese tiempo.

La fiesta, después de los fuegos, continúa en el Lido (otra de las islas que debes visitar), con bailes y música hasta el amanecer. Por la mañana tiene lugar la Regata del Redentor, en la que participan un gran número de barcos típicos.

Uno de los festejos con más historia de toda Venecia es la Festa di San Piero de Casteo. Acudiendo no solo serás participe de esta tradición milenaria, sino que también vas a disfrutar de música en directo y puestos en los que se ofrecen platos típicos de la cocina veneciana.

El evento se realiza durante varios días consecutivos a finales de junio (aunque en ocasiones puede llegar a los primeros días de julio). Tiene un origen religioso y, de hecho, comienza con una misa en la Basílica de San Pedro oficiada por el mismo Patriarca de la ciudad. Después de esa misa se realiza una procesión por el agua que sale del canal de San Giuseppe y los pescadores de la ciudad ofrecen el denominado anillo piscatore al Patriarca.

El grueso de las actividades tienen lugar frente a la Basílica de San Pietro, situada en el barrio (sestiere) de Castello, al este del centro histórico. Puedes llegar andando o con uno de los vaporettos venecianos que llegan a la zona.

Ir a un cine de verano es, para muchos, una forma de regresar a la infancia. Si, además, se puede hacer en una ciudad como Venecia, las sensaciones se multiplicarán. El Cinema Arena Campo de San Polo es el lugar ideal para vivir unas horas de cine, socialización y encuentro en la Ciudad de los Canales.

El lugar donde tienen lugar las proyecciones se encuentra en el Campo San Polo, en el barrio de San Polo. Se trata de un cine al aire libre con una larga historia en la ciudad y solo funciona entre finales de julio a los últimos días de agosto en Venecia.

La pantalla del cine al aire libre es la más grande de toda la ciudad y en ella se proyectan generalmente reposiciones de las películas más taquilleras del año. De vez en cuando, no obstante, se puede encontrar algún estreno. Aunque la experiencia vale la pena incluso si no sabes italiano, algunas de esas películas se emiten en versión original.

El verano en Venecia suele ser bastante caluroso y húmedo. En su inicio, a finales de junio, puede haber episodios de lluvia, pero las precipitaciones disminuyen conforme avanza la estación. Las temperaturas sobrepasan con frecuencia los 30º. No olvides, en cualquier caso, consultar la previsión del tiempo poco antes de viajar para que sea más fiable.

De sobras es sabido que los turistas que visitan el Vaticano deben seguir unas reglas en su vestimenta, pero ¿pasa esto también en las iglesias venecianas?

En principio, la mayoría de las iglesias no establecen ninguna obligación al respecto, aunque siempre puede pasar que te digan algo. Donde se da esto con más frecuencia es en la Basílica de San Marcos. Allí es muy probable que te pidan cubrirte las piernas y los hombros y, de hecho, suele haber algún puesto donde venden unas telas marrones para que te las pongas a modo de bufanda o pareo.

Los atractivos que ofrece Venecia la convierten en una ciudad que siempre merece visitar. Pero, aun así, cada estación tiene sus ventajas y desventajas.

A diferencia de Venecia en invierno, los pros de viajar a esta ciudad en verano son los siguientes:

• Más horas de sol: no solo llueve mucho menos, sino que hay muchas horas de luz y, por lo tanto, se pueden alargar los recorridos.
• Puedes ir a la playa: no se suele considerar a Venecia como un destino playero, pero si no puedes pasar sin tumbarte en la arena y darte un baño vas a encontrar varias playas en las islas cercanas.
• Más ambiente: los locales de la ciudad comienzan a llenarse cuando cae la tarde. Es el momento de tomar algún aperitivo en las terrazas y disfrutar de la música que ameniza la velada .

Por otra parte, también vas a encontrar algunos inconvenientes si viajas en época estival:

• El calor durante el día: el verano veneciano deja siempre algunos días de calor excesivo. La humedad, además, no ayuda a que el ambiente sea agradable.
• Precios más altos: al ser temporada alta, los precios de los vuelos y de los alojamientos suben bastante. Mi consejo es que trates de reservar con bastante antelación.
• Gran afluencia de turistas: la ciudad se llena de visitantes durante los meses de verano. Las visitas no van a ser tan cómodas como te gustaría y además se forman largas colas para entrar en los lugares más conocidos.