11 cosas que hacer en Madrid en Navidad
Si tienes planeado visitar Madrid durante la Navidad, estás de enhorabuena. La ciudad se engalana para las fiestas y vas a poder disfrutar de ella en todo su esplendor
En cualquier época que la visites, la gran cantidad de atractivos que ofrece Madrid harán que no te aburras en ningún momento. Sin embargo, existen algunos periodos en los que la capital se transforma y es, si cabe, aún más interesante. Uno de esos momentos es la Navidad, cuando toda la ciudad se viste de gala para celebrar la festividad.
Durante las fiestas, Madrid luce todavía más bella y su atmósfera se vuelve única. Si no la has visitado nunca en estas fechas, te recomiendo reservar un billete. Decoraciones, árboles y luces te dejarán sin aliento.
1.Vive la Navidad en el Parque Warner
Qué mejor época para visitar el Parque Warner de Madrid que la Navidad, una fecha clave en el calendario de este parque de atracciones cuya decoración te dejará boquiabierto. En tu visita podrás disfrutar de, nada más y nada menos, que 34 atracciones, además de espectáculos en vivo.
Y lo mejor de todo, podrás recorrer el Lejano Oeste, subir a las montañas rusas o explorar sus áreas temáticas: Cartoon Village, DC Super Heroes World, Movie World Studios, Old West Territory y Hollywood Boulevard. No lo dudes, atrévete a montarte en la torre de caída más alta del mundo. ¡Una experiencia muy divertida y espectacular!
2. No te pierdas el mercado de la Plaza Mayor
Si has ido a Madrid en el mes de diciembre, podrás comprobar como la Plaza Mayor se llena de casetas. Vale la pena acercarse para comprar figuritas para el belén, caretas de disfraz, árboles, musgos, muérdago, gorros y mucho más. Se inaugura en concomitancia con el encendido de las luces navideñas – normalmente, a finales de noviembre - y opera de 10:30 a 21 (de domingo a jueves) y de 10 a 22 (viernes, sábados y vísperas de festivos).
Este mercado es un histórico de Madrid. Ya en el siglo XVII, los vendedores de animales, frutas, verduras y adornos navideños se reunían en la cercana Plaza de Santa Cruz. Unos 200 años después, el ayuntamiento empezó a regular la venta de las licencias y los mercaderes se mudaron al espacio actual.
Para una experiencia 100% madrileña, puedes merendar con un clásico de la ciudad: el bocadillo de calamares. Cerca de la Plaza Mayor puedes optar por La Ideal (Calle Botoneras 4), Bar Postas (Calle Postas 13) y La Campana (Calle Botoneras 6).
3. Déjate fascinar por las luces navideñas
En el último mes del año, Madrid se vuelve aún más brillante. Las luces navideñas embellecen sus calles y afortunadamente existe un modo para verlas en toda comodidad: Naviluz, el autobús que toca los puntos más emblemáticos de la capital. También puedes optar por reservar el típico paseo en autobús turístico aunque el recorrido tiene otro objetivo, podrás disfrutar de la mayoría de calles y sus luces.
El recorrido se realiza en un bus descubierto de dos pisos y el trayecto dura entre 40 y 50 minutos. En poco menos de una hora, el vehículo pasa en las siguientes zonas:
- Calle Serrano.
- Calle Velázquez.
- Plaza de la Independencia.
- Calle y Puerta de Alcalá.
- Plaza Cibeles.
- Gran Vía.
- Calle de los Reyes.
- Calle Maestro Guerrero.
- Plaza España.
- Paseo de Recoletos.
4. Disfruta de un cocido madrileño
Para entrar en calor, no hay nada mejor que un buen plato de cocido. Los origines de este plato están envueltos en el misterio, aunque se cree que deriva del cholent, un plato tradicional de los judíos ashkenazi. Lo que es cierto es que la receta era muy común entre las clases menos pudientes ya que su cocción lenta era útil también para calentar las casas.
En Madrid, puedes encontrarlo en un sinfín de bares y tabernas, a menudo en un día concreto de la semana. En el centro, Lhardy es una opción recomendable. Inaugurado en 1839 por el cocinero francés Emilio Huguenin, fue el primer restaurante en ofrecer mesas separadas y una carta con precios fijos. El establecimiento conserva la elegante decoración decimonónica (Carrera de San Jerónimo 8).
Otras opciones son Casa Carola (Calle de Padilla 54), Malacatín (Calle la Ruda 5) y La Gran Tasca (Calle Santa Engracia 161). ¡Reserva con antelación!
5. Escápate a la sierra
En diciembre, la nieve empieza a cubrir los bosques y las pistas de esquí de la sierra madrileña. ¿Cuál mejor ocasión para pasar un día en la naturaleza?
Aunque la capital no cuenta con instalaciones como la de los Alpes o de los Pirineos, no faltan opciones a la hora de esquiar. Con los primeros fríos, los madrileños de pura cepa acuden a Navacerrada, una estación de esquí y snowboard en la Sierra de Guadarrama.
Llegar hasta aquí es muy sencillo. Puedes reservar una excursión a la Sierra de Guadarrama o si te decides por Navacerrada y dispones de un coche propio o de alquiler, te bastará con tomar la autopista A6 hasta Collado Villalba para luego coger la carretera M601 Madrid – Segovia hasta llegar al municipio. Como alternativa, puedes optar por un tren desde la Estación de Chamartín hasta Cercedilla y, una vez allí, subir al tren de Cotos hasta el Puerto de Navacerrada.
6. Pasa un día en el Parque de Atracciones
Entre diciembre y el principio de enero, ir al Parque de Atracciones de Madrid es una experiencia mágica ya que inaugura la temporada navideña. En estas fechas, podrás disfrutar de actividades para niños, encuentros con Papá Noel y los Reyes Magos, espectáculos, villancicos y mucho más.
La programación cambia de año en año, pero hay algo que siempre queda igual: las espectaculares decoraciones de Navidad. Para llegar, te bastará coger el metro y bajar en la parada Batán (línea 10).
7. Haz un recorrido por los belenes
¿Qué sería de las Navidades sin un bonito pesebre? Afortunadamente, cuando se acerca la Navidad, las principales iglesias y espacios públicos de Madrid se llenan de estatuillas de pastores, Sagradas Familias y Reyes Magos. El listado de abajo reúne las opciones que más me gustan:
- Belén Napolitano, un clásico de la capital. Cada año, si vas a visitar el Palacio Real de Madrid en estas fechas, verás que hospeda un pesebre histórico, cuyo origen se debe a Carlos III que, antes de convertirse en el rey de España, gobernó en Nápoles y Sicilia. Se encuentra en el Salón de Alabarderos. (Calle de Bailén s/n).
- Belén de la Iglesia de San Ginés, una joya desconocida. Durante la época navideña, el templo situado en la calle Arenal esconde en su fachada el pesebre barroco más bello de la capital. Sus figuras de tamaño real son una auténtica joya. (Calle Arenal 13).
- Belén de la Real Casa de Correos. Cuenta con más de 150 figuras y la temática cambia de año en año. Por su ubicación céntrica, es uno de los más visitados de la ciudad. (Puerta del Sol).
- Belén del Convento de las Carboneras, el nacimiento procedente de Ecuador. La difusión de las costumbres cristianas en América Latina dio origen a unos pesebres con rasgos y vestimentas típicas de las colonias de ultramar. En concreto, este belén fue realizado en Quito y, tras un largo viaje, llegó a Madrid a finales del siglo XVI. (Calle de Puñonrostro, 2).
- Belén del Monasterio de las Descalzas Reales. Reproduce la primera Navidad celebrada por San Francisco de Asís en la cueva de Greccio. (Plaza de las Descalzas s/n).
- Belén Municipal, un espléndido pesebre exterior. Recrea un paisaje tradicional embellecidos con musgo, piedras y unas figuras moldeadas por artistas como Olot, Almansa y José Luis Mayo. (Plaza de la Villa).
8. Deslúmbrate paseando por el Jardín Botánico
Utilizando la misma manera que para llegar al Museo del Prado, ya que se encuentra a pocos metros, vas a poder disfrutar de otra atracción imperdible: Naturaleza Encendida. Este evento es un recién llegado en Madrid – la primera edición se ha celebrado en 2019 – pero se ha convertido rápidamente en un clásico navideño.
Se trata de una exposición temática que ilumina el Real Jardín Botánico con LED y proyectores. En el primer año, el parque madrileño se convirtió en un bosque de hadas mientras que en 2021 homenajeó las expediciones marítimas de Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano. Te recomiendo reservar con antelación, ¡las entradas vuelan!
9. Vive la Cabalgata de los Reyes
Los reyes de oriente llegan a Madrid el 5 de enero. Cada barrio tiene su cabalgata, aunque la más hermosa es la que empieza en Nuevos Ministerios y concluye en Plaza de Cibeles.
Melchor, Gaspar, Baltasar descienden el Paseo de la Castellana acompañados por el tradicional lanzamiento de caramelos desde las carrozas. Al terminar el recorrido, los fuegos artificiales iluminan el Palacio de Cibeles.
Si viajas con niños a Madrid, te recomiendo elegir un buen sitio. Una vez situado en un lugar, no será fácil alejarte de allí. Para tener una mejor visual, algunos padres llevan una banqueta o una pequeña escalera, pero me imagino que no te apetezca llevar una durante tus vacaciones. Para obviar a esto, puedes llegar un poco más temprano y coger sitio cerca de las barandillas o alejarte un poco para verlas desde las gradas. Para más info, te recomiendo consultar la página oficial de turismo de Madrid.
10. Lleva a los peques a Cortylandia
Si viajas con tus hijos, no puedes perderte Cortylandia, el espectáculo navideño más famoso de la ciudad. La fachada trasera del Corte Inglés de la calle Preciados se transforma en una gran pantalla con luces, música y figuras semovientes. El tema es cada vez distinto y los espectáculos se repiten a lo largo del día. Habitualmente, abre a finales de noviembre y se desmonta después del 7 de enero.
Aunque no lo parezca, Cortylandia es un histórico de la capital. El primer escenario fue colocado en 1979 y representaba la sabana africana. Para su puesta en escena se utilizó una locomotora procedente del Parque de Atracciones.
Los dueños del centro comercial decidieron crear el espectáculo con un doble fin: ennoblecer el acceso de la calle Maestro Victoria creando al mismo tiempo una nueva atracción. Unos cuantos años después, Cortylandia sigue siendo un imprescindible de las fechas navideñas.
11. Siéntete como una estrella de cine
Patinar debajo de un gran abeto nos traslada inmediatamente a las películas americanas. La pista debajo del Rockefeller Center de Nueva York son parte de nuestro imaginario, pero no hay que cruzar el charco para deslizar sobre el hielo. A continuación, encuentras las mejores pistas de Madrid:
- Plaza España, una pista de 450 m2 a lado de la Gran Vía y a los pies del Edificio España. Este espacio ha sido completamente remodelado siguiendo el proyecto ganador de una encuesta popular. Desde la plaza, unos senderos peatonales llegan hasta el Templo de Debod y la Catedral de la Almudena. Entre finales de noviembre y principio de enero, abre de 10:00 a 22:00
- Matadero, el espacio cultural a orillas del Manzanares. Debajo de las naves convertidas a centros expositivos se ubica un circuito de 600 m2. La entrada te dará acceso a la pista por media hora e incluye el alquiler de patines y guantes (Plaza de Legazpi 8)
- Palacio de Cibeles, una de las más demandadas. Durante la época navideña, la Galería de Cristal del emblemático edificio modernista hospeda una pista indoor. Patinarás debajo de una bóveda acristalada muy sugestiva (Calle Montalbán 1)
- Reina Sofía, para rematar un día de visitas. Después haber admirado las mejores obras del museo, podrás estirar las piernas en el circuito de Plaza Juan Goytisolo
- Madrid Dreams, la pista olímpica de la ciudad. Si el patinaje es tu pasión, vale la pena alejarse del centro. Se encuentra en un centro comercial en el distrito de Hortaleza. Para más info, te recomiendo consultar la web oficial (Calle Silvano 77)
- Plaza Colón, el espacio que homenajea al patinador campeón del mundo Javier Fernández. La pista tiene 40 metros de largo y 20 de ancho y a su lado encontrarás un dj set, un tiovivo y mercadillos navideños. El 10% de la recaudación se destina a Down España, una asociación que facilita la inclusión de las personas con Síndrome de Down.
Afluencia turística en Navidad
En diciembre, muchos españoles viajan a Madrid antes de las Navidades. Principalmente, llegan a la capital para hacer shopping, disfrutar de un city break, visitar amigos y familiares o ver los principales atractivos que ofrece Madrid. Como resultado, esta es una de las épocas más concurridas del año.
Dado el alto número de turistas, las calles del centro se cortan al tráfico. Podrás pasear libremente desde el Palacio Real hasta la Plaza de Cibeles.
¿Vale la pena visitar Madrid en Navidad?
A pesar de la muchedumbre, es una opción más que recomendable. En el último mes del año, las luces iluminan las calles, los árboles aparecen en las plazas y los vendedores de castañas se instalan en los principales rincones del centro. En Navidad, la atmósfera es simplemente mágica.
Además, podrás aprovechar la ocasión para ir de compras. La capital cuenta con un sinfín de tiendas y a escasos kilómetros encontrarás un outlet de lujo: Las Rozas Village.