Qué ver y hacer en Reims en 3 días
Desde su impresionante catedral hasta su vibrante escena culinaria, la ciudad ofrece un caleidoscopio de experiencias que te dejarán sin aliento y aquí te ayudo a optimizar tu itinerario para una escapada perfecta de fin de semana.
Calles de Reims | ©Adian
Reims es una ciudad que rebosa energía y carácter, y tres días apenas bastan para arañar la superficie de todo lo que tiene que ofrecer, tanto si eres un aficionado a la historia como a la gastronomía, en especial los amantes del champán, aquí hay algo para todos los gustos. Así que prepárate para perderte en la impresionante arquitectura, la acogedora gente y el animado ambiente que hacen de Reims un lugar tan especial.
Y, mientras paseas por sus calles y exploras sus joyas ocultas, dedica un momento a apreciar el legendario champán que corre por sus venas, recordándonos que la vida está hecha para ser celebrada. Abraza el espíritu de Reims y déjate llevar por sus encantos infinitos con este itinerario de 3 días con mapas para que no te pierdas ninguna de las mejores cosas que hacer y ver en Reims.
Día 1: Explora la zona norte del centro de Reims
En el corazón de esta pintoresca región de Champaña-Ardenas se encuentra la encantadora Reims, famosa por sus monumentos culturales y arquitectónicos, su extraordinaria gastronomía y, por supuesto, por ser la ciudad francesa de las consagraciones y las burbujas de champán.
Por eso, vamos por partes, el primer día de tu recorrido te propongo un paseo de 9 paradas por los lugares emblemáticos de la tierra no oficial del champán. El recorrido abarca un radio de 2,5 kilómetros que puedes seguir con este mapa. Es bastante sencillo y lo puedes hacer a pie, en bici o en transporte público. Además, si te apetece conocer en detalle cada lugar, puedes anotarte en un tour privado por Reims. Dicho esto, ¡comencemos!
El Palacio de Tau
Una visita obligada es el Palacio de Tau, antigua residencia de los arzobispos de Reims donde se emplaza en la actualidad el Museo de la Obra de Notre-Dame y es el espacio de celebración de los banquetes conmemorativos de las consagraciones.
Este impresionante edificio es a la vez histórico y visualmente imponente. Cuenta con una colección de objetos únicos que revelan el pasado de la ciudad, entre la que se incluye una de las mayores colecciones de tapices del mundo, por lo que es uno de los sitios nombrados Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en esa zona gala.
La Biblioteca Carnegie de Reims
La Biblioteca Carnegie, financiada por el filántropo escocés-estadounidense Andrew Carnegie, fue construida en estilo Art Déco y cuenta con una impresionante decoración que evoca la época dorada de los Estados Unidos en la década de 1920.
Esta biblioteca pública forma parte del grupo de unas 2500 bibliotecas Carnegie que se construyeron en el siglo XIX y XX. Además de ser un lugar de lectura y estudio, la Biblioteca Carnegie es un ejemplo del legado de Carnegie y su compromiso con la educación y el acceso a la información para todos.
La Catedral de Reims
La Catedral de Nuestra Señora de Reims, mayormente conocida como la catedral de Reims o la Catedral de Notre-Dame, es una de las catedrales más bonitas de Francia. Esta, a pesar de haberse visto eclipsada muchas veces por su hermana parisina, presume de su valor histórico, ya que todos los reyes franceses fueron coronados aquí.
El interior destaca por la iluminación de la nave y exquisitas vidrieras del siglo XIII. La capilla axial exhibe vidrieras azules diseñadas por Marc Chagall y magníficas esculturas de ángeles con sus alas extendidas para arropar a la ciudad.
Visita la Catedral de Notre-Dame, un magnífico edificio construido en el siglo XIII. Es una de las obras maestras de la arquitectura gótica más impresionantes del país que se reconstruyó en tiempo récord tras la devastación de casi el 80 % de la ciudad durante la Primera Guerra Mundial. Además, es un testimonio de la habilidad y el talento de los artesanos que la crearon con intrincadas tallas e impresionantes vidrieras que te dejarán sin aliento.
La Place royale
La Place Royale, construida en 1757, fue edificada en honor de Luis XV, tal como lo deja saber su monumento central creado por Jean-Baptiste Pigalle en 1765. Esta plaza de arquitectura típica del siglo XVIII alberga arcadas y tejados con balaustres horizontales.
En el fondo, el frontón del antiguo Hôtel des Fermes, actual sede de la diputación, hace referencia a las actividades comerciales de Reims. El paso por este punto es rápido, pero merece la pena disfrutar del monumento.
El criptopórtico
El criptopórtico, situado en la zona sagrada del foro, cuenta con un pórtico monumental semisubterráneo que lo rodea. Tras diversos estudios arqueológicos en los adobes arqueados del edificio, los especialistas se inclinan por pensar que el punto de origen de este monumento se remonta al siglo I d.C.
Aunque su función exacta es desconocida, hay varias teorías que sugieren que podría haber sido utilizado como lugar de reunión, debate, paseo o mercado cubierto en relación con las tiendas cercanas. Lo que se sabe es que su entrada indica un uso diferente al de la arquitectura circundante, y su altura de más de 5 metros lo hace una estructura impresionante, digna de ser incorporada en tus memorias del viaje a Reims.
El Musée-Hôtel Le Vergeur
La historia del Museo Hotel Le Vergeur se remonta al siglo XIII, cuando se celebraban mercados en el Foro. Los vestigios del foro galo-romano aún pueden verse hoy en día. Los dos niveles de bodegas abovedadas del hotel indican que en el pasado se utilizaba para el comercio de vinos tranquilos de Champaña.
En 1895, el conde Werlé, presidente de la Casa Veuve Clicquot-Ponsardin, cedió la propiedad a uno de sus socios que restauró el gran salón gótico. El Hotel le Vergeur tomó entonces el nombre de Maison Champagne Couvert. Más tarde se convirtió en hogar del fotógrafo Hugues Krafft y en la actualidad alberga una nutrida colección de arte en su museo.
El Hôtel de ville de Reims
La siguiente es otra parada de fotografía, esta vez en el Hôtel de ville de Reims. Se trata de un lugar que combina historia, cultura, y belleza arquitectónica. Desde su construcción en 1499, este majestuoso edificio ha sido la sede de las instituciones municipales y sigue siendo un importante símbolo de la ciudad.
Con su diseño cuadrado y sus alas simétricas, este hotel encierra un patio central, donde se encuentra la estatua de René de Saint-Marceaux, que representa la vid y la espuma del champán.
El barrio Boulingrin
Llegó la hora de almorzar y de camino a tu siguiente parada pasas por el bonito y moderno barrio Boulingrin, el lugar del art déco, arte callejero y escapadas gastronómicas.
Aquí podrás probar especialidades como el queso de corteza naranja producido en Langres o bien el cremoso Chaource, similar al popular Camembert en cualquiera de sus tiendas gourmet. Además, la charcuterie Bruno Herbin, catalogada como una de las mejores del país, ofrece el mejor Jamón de Reims de la región, gracias a su combinación secreta de hierbas provenzales. Y no olvidemos la variedad de restaurantes que encontrarás alrededor. Toma tu tiempo y recarga energías.
La Puerta de Marte
La Puerta de Marte en Reims es un monumento histórico impresionante que vale la pena visitar. Con 30 metros de ancho y más de 12 metros de altura, la puerta se conserva casi intacta a pesar de que su historia se remonta al siglo II. Los cuatro arcos que la componen representan las cuatro entradas a la ciudad de Durocortorum, antiguo nombre de Reims.
Además, el interior de los arcos está bellamente decorado y cuenta con una figura de la loba amamantando a los gemelos fundadores de Roma, Romulus y Remus. Alrededor del parque donde se emplaza, hay otros sitios de interés como la Fuente de los Hautes Promenades.
Este es el lugar perfecto para terminar la tarde, y lo mejor de todo es que también hay una buena oferta de terrazas y bares donde puedes ir para cenar y disfrutar de un buen champán.
Día 2: Bodegas y viñedos en Epernay y Hautvillers
El segundo día de tu viaje te propongo una de las mejores excursiones de un día desde Reims para visitar los viñedos de Epernay y Hautvillers.
En este caso las paradas variarán dependiendo de los operadores, sin embargo, a menudo tienen en común algunos puntos: duran entre 7-8 horas, abarcan los viñedos más famosos de la zona, ofrecen un servicio con almuerzo y traslados incluidos y, por supuesto, podrás degustar el champán, ¡viva el champán! Los puntos destacados de cada pueblo son:
Epernay
Conocida extraoficialmente como la capital del champán gracias a la abundancia de Casas de Champaña, así como a su envidiable ubicación al sur de la Montaña de Reims, o el Parque Natural Regional de Reims, la primera parada es Épernay, donde el aroma a las uvas de Chardonnay y Pinot Noir impregnan la atmósfera.
Epernay es una de las tres ciudades principales de Champaña, en el este de Francia. El paseo comienza por la Avenue de Champagne, lugar que recibe su nombre por albergar las bodegas de las célebres marcas de champán como son: Pol Roger, Boizel, Perrier Jouët y, por supuesto, Moët & Chandon. Esta es la zona donde degustaras champagne.
Además de las bodegas, un camino de viñedos y paradas en los llamados terruños del champán, durante el camino también encuentras varios monumentos dedicados al preciado líquido, así como al monje que revolucionó la industria del champán en el siglo XVII, Dom Perignon, de quien conocerás su historia.
Hautvillers
Hautvillers es la antigua capital de la región de Champaña y una visita obligada para todo aquel que desee conocer más a fondo esta famosa bebida. En esta zona descubres buena parte de la historia de la tradición del champán alrededor de la Basílica de Saint-Sindulphe, donde se emplaza la Abadía de Hautvillers y es el lugar donde reposan los restos del maestro bodeguero Dom Pérignon.
Asimismo, hay una gran variedad de sitios emblemáticos y viñedos familiares como el Champagne Joseph Desruets.
Día 3: Explora las bodegas de la zona sur de Reims y su pulmón natural
Con tanto que ver y experimentar en un solo día, no es de extrañar que Reims sea conocida a menudo como la "Ciudad de los Reyes". Ahora ya hiciste un día de turismo enológico, quedan por recorrer otros monumentos y emblemas de la ciudad, esta vez hacia el sur. Para despedirte de Reims, te propongo pasear por 5 sitios de interés turístico imperdibles en Reims.
Como siempre aquí te dejo un mapa con los 3,4 kilómetros de recorrido del día.
Parque de Champagne
El Parque de Champagne es un pulmón natural de la Reims que los locales denominan su preciado oasis de tranquilidad.
Emplazado en el corazón de la región vitivinícola de Champagne, cubre una extensión de 8 hectáreas con numerosos senderos para caminar entre los viñedos, áreas de picnic, un precioso jardín botánico, un lago, monumentos y hasta parque para perros. Este es un lugar perfecto para disfrutar de la belleza natural de la región.
Bodega Vranken Pommery
Champagne Vranken es una bodega familiar que se encuentra en la icónica Villa Demoiselle, una zona de la ciudad que en sí misma es una obra maestra del Art Déco y Art Nouveau.
La bodega ofrece visitas guiadas a sus bodegas subterráneas, donde se pueden conocer los secretos de la elaboración del champán y degustarlo. Una experiencia única para los amantes del emblema galo en un entorno histórico impresionante.
Cave Taittinger
Cave Taittinger es otra de las bodegas que merecen la visita porque es mucho más que una bodega de champagne, es un destino de ensueño que combina historia, tradición y arte. La visita guiada por sus impresionantes bodegas subterráneas es una experiencia que ha transportado a los visitantes a otro tiempo y lugar desde el siglo XVIII cuando abrió sus puertas como centro de visitas.
Sin embargo, la historia de estas bodegas se remonta al siglo IV para extraer tiza. 900 años después, se convirtieron en los sótanos de la abadía de Saint-Nicaise y más tarde se crearon bodegas, criptas y bóvedas destinadas a almacenar los vinos de champagne que comercializaban los monjes benedictinos. El ambiente mágico se complementa con la degustación de sus champagnes más exquisitos, y la belleza de la ciudad de Reims es el telón de fondo.
El paso por Veuve Clicquot Ponsardin
El paso por Veuve Clicquot Ponsardin es una experiencia inolvidable en el mundo del champagne. Esta bodega, con más de 200 años de historia, ofrece visitas guiadas por sus bodegas subterráneas, donde se puede descubrir el proceso de elaboración del champagne y su legado histórico.
La cata de sus champagnes más exclusivos, incluyendo el famoso Yellow Label, es el punto culminante de la visita. Además, su compromiso con la sostenibilidad y la innovación es ejemplar. Una visita imprescindible cuando se visita la capital mundial del champagne.
Parque Butte Saint-Nicaise
Antes de dirigirte a tu siguiente parada, puedes parar a comer el almuerzo, aunque siendo honestos, las degustaciones en bodegas suelen incluir platos con delicatessen, en especial su famoso jamón de Reims, así como el famoso queso de corteza naranja, así que, probablemente solo se te antoje algo ligero.
Tienes opciones como Le Jardín Restaurant con platos para todos los gustos. Aprovecha también para probar las famosas ”Biscuits Roses”, antes de entrar al Parque de la Buttle Saint-Nicaise, un tesoro histórico y natural que ofrece vistas espectaculares de Reims y sus viñedos. Descubre la rica historia de esta fortificación medieval.
Su historia está íntimamente ligada al lema de la ciudad "Dios en guardia". El primer día de tu itinerario de 3 días visitaste el fuerte del norte, “La Puerta de Marte”, ahora te despides de la ciudad con el punto sur de los 4 monumentos que conforman el cinturón de fuertes de Reims desde 1870, el Parque de la Butte Saint-Nicaise.